Bullying, problema social en aumento 03/may/17

Si los padres de familia no detectan conductas antisociales en sus hijos, éstos pueden ser generadores de violencia en su entorno futuro.

En las ocasiones en las que los niños se rehúsan a asistir a la escuela, los padres de familia sólo piensan en que la causa es por flojera para realizar las obligaciones escolares, por no tener que levantarse temprano o simple apatía al estudio, sin embargo, la mayoría de las veces la razón es mucho más importante y la problemática rebasa no sólo a los menores, sino a los propios padres de familia y a los maestros de los planteles escolares.

En la actualidad, cada vez se conocen más casos sobre el “bullying”, un tipo de acoso escolar en el que intervienen personas que cumplen tres roles o papeles diferentes: la víctima, el acosador (o acosadores) y el espectador (o espectadores).

Las características del acoso escolar se generan por la diferencia de fuerza o poder entre la víctima y el agresor, repetición de los comportamientos agresivos e intencionalidad de estas actitudes.

Para Lucía Legorreta, presidenta nacional del Centro de Estudios y Formación Integral de la Mujer, alrededor del 25 por ciento de los estudiantes han sido víctimas de dichos acosos y en repetidas ocasiones, incluso, en el mismo día.

Diversas son las maneras en las que la víctima es maltratado por su agresor o agresores, desde insultos, humillaciones, tareas forzadas, hasta agresiones físicas.

De igual manera acciones para ridiculizarlos o bien la famosa “ley del hielo” que prevalece sobre todo entre niñas y jovencitas que ignoran y aíslan a la compañera.

Los agresores o “bullies” se caracterizan por ser poco tolerantes e impulsivos; de personalidad dominante, perciben la violencia como algo positivo, se relacionan con niños mayores y les gusta menospreciar a los demás.

La víctima, por el contrario, son niños cautelosos, sensibles, inseguros y socialmente aislados.

En el caso de los varones son débiles físicamente y en algunos casos son dependientes de sus agresores.

El personaje que termina conformando el “triángulo del acoso escolar” o bullying es el espectador. Son cómplices de la agresión y se caracterizan por ser inseguros y su falta de carácter y empatía. “Considero graves a estos actores pasivos que se dan cuenta de lo que sucede a sus compañeros y no se atreven a defenderlos o denunciar a los agresores con los maestros o alguna otra autoridad”, manifiesta Lucía Legorreta.

Las consecuencias de los que conforman este triángulo del acoso sexual son muy serias; a las víctimas les ocasiona fracaso, niveles altos de ansiedad y la formación de una personalidad insegura.

Los agresores se acostumbran a ser violentos, generando gran dificultad para relacionarse de manera sana y aunque aparentan fortaleza viven en gran soledad. Por lo que respecta a los espectadores, generan insensibilidad ante el sufrimiento ajeno, indefensión semejante a la de las víctimas y son débiles y faltos de carácter.

Es importante que los padres de familia hablen constantemente con sus hijos porque si éstos sufren acoso, o son los agresores, el fenómeno puede trasladarse en el futuro al ambiente laboral, a su comunidad e incluso a su familia.

CARACTERÍSTICAS DE BULLYING

Definición: “Bullying” es una palabra inglesa que significa agresión. Implica golpear o dar patadas a otros compañeros de clase, hacer burlas, etcétera. Características Suele incluir conductas de diversa naturaleza (burlas, amenazas, agresiones físicas, aislamiento).

Tiende a originar problemas que se repiten y prolongan durante cierto tiempo.

La víctima desarrolla miedo y rechazo al contexto en el que sufre la violencia. Suele estar provocado por un alumno, apoyado por un grupo, contra una víctima que se encuentra indefensa

Tipos de bullying:

Acoso directo: Peleas y agresiones físicas.

Acoso indirecto: suele ser más común entre las niñas y en general a partir de la preadolescencia. Se caracteriza por pretender el aislamiento social del individuo

Categorías:

Físico (empujones, patadas, agresiones con objetos).

Verbal, es el más habitual (insultos, apodos, levantar falsos, crear chismes alrededor de la víctima).

Psicológico, bajan la autoestima del individuo y fomentan su sensación de temor.

Y por último el social (pretende aislar al joven del resto del grupo y compañeros).

CÓMO PREVENIR EL BULLYING

Conversar frecuentemente con los hijos, generando instancias de diálogo y desarrollar las habilidades sociales de los niños.

La escuela y los educadores en particular, también juegan un papel clave en este proceso, enseñándoles a los menores el respeto por uno mismo y los demás.

La única manera de combatir el maltrato es la cooperación entre todos los involucrados: profesorado, padres y alumno.

Escrito por María Eugenia Robles

Consolidarán “Mochila Segura” con padres de familia

La educación y seguridad de los niños y jóvenes recae solamente en los padres o tutores que se hacen cargo de ellos, aseguraron distintas asociaciones civiles que forman parte de la Asociación de Escuelas Libres de Bullying, al defender el programa de Mochila Segura.

Consideraron que la atención es indispensable de los padres hacia sus hijos y una relación de colaboración entre las instituciones educativas para evitar que continúen sucesos lamentables en escuelas, la operación de armas por los alumnos y la reducción del bullying.

El director, Luis Saracho Alatorre, indicó que el 95% de los padres de familia están de acuerdo en estas revisiones de las mochilas, siempre y cuando se respeten los derechos de los infantes.

Sin embargo, refirió que el reto está en cómo aplicarlo, puesto que todo mundo es revisado en aeropuertos o eventos especiales y por lo tanto los niños deben aprender que la seguridad amerita ese tipo de ejercicios.

En tanto, Ismael Vargas Ibarra, director de seguimiento y evaluación de la gestión de la Coordinación de Educación Básica de Jalisco, informó que en coordinación con la Asociación, se realizará una serie de pilotaje de programas de seguridad y educación a padres de familia. Se pretende iniciar por las cuatro escuelas que solicitaron la aplicación del programa y por falta de la anuencia de la mayoría de los padres, no se firmó el permiso para la revisión de mochilas.

La Asociación de Escuelas Libres de Bullying explicó que sólo el 20% de los padres de familia ni siquiera conocen cuál es la mochila de sus niños.

Finalmente lamentaron que la Comisión Estatal de Derechos Humanos de Jalisco (CEDHJ) no quiera participar en el acuerdo que se ha logrado con las asociaciones y la Secretaría de Educación de este tema.

Fuente: El Occidental