Muere en Tala el luchador Pedro "el perro" Aguayo 04/jul/19

Fallece creador de las llaves: La Silla y Lanza Zacatecana

Temido dentro del ring como uno de los más grandes peleadores de la lucha libre mexicana, reconocido por sus características botas peludas, además de ser uno de los rivales de El Santo, Pedro Aguayo Damián, mejor conocido como El Perro Aguayo, falleció ayer a los 73 años, dejando un legado con un grandes palmarés y luchas de apuestas que lo catapultaron como una leyendas del pancracio.

▶ El originario de Zacatecas nació el 18 de enero de 1946 en el seno de una familia humilde de campesinos con 16 hermanos, hijo de José Santana Aguayo y Gabina Damián Puentes. Al poco tiempo se mudaron a Tala, Jalisco, pero por su necesidad económica se vieron obligados a mudarse a Guadalajara.

Panadero, zapatero, futbolista, así como boxeador, fueron algunos de los trabajos que realizó antes de debutar en el cuadrilátero. Con apenas 16 años, Apolo Romano lo invitó a un entrenamiento de lucha libre; sin embargo, el trayecto a la gloria no fue sencillo, ya que tuvo que pasar por lágrimas, humillaciones y lesiones para ganarse un lugar dentro de este difícil deporte.

No fue hasta el 10 de mayo de 1970 cuando, luego de mucho entrenamiento ahora bajo la tutela del maestro Cuauhtémoc Diablo Velazco (1919-1999), Aguayo debutó al lado del Indio Jerónimo contra Alfonso Dántes y Red Terror. Su atuendo se componía simplemente de un chaleco y botas a juego, simulando ser de pelo de perro y un calzón negro.

Sus cicatrices en la frente avalaban que se convertiría en una de las grandes leyendas del pancracio nacional. Poco a poco fue cosechando su fama como un perro difícil de domar y con ello desenmascarar a máximos gladiadores de su época como El Desertor, The Black Power I y II , Rangers de Texas , Konnan y Máscara Año 2000.

No sólo fue temido por los enmascarados, pues en sus 31 años como profesional, también fue el verdugo de las melenas al haber ganado más 100 cabelleras destacando las de Luis “Tigre” Mariscal, en 1972); El Texano, en 1983; Cien Caras, en 2000; El Indómito (1989), Máscara Año 2000 (2001), Faraón (1986);Sangre Chicana en 1987, Scorpio Sr., en 1987, entre otros luchadores.

Contó con varios campeonatos importantes a lo largo de su ilustre carrera . Se coronó en campeonatos como en la Triple A, donde fue Campeón de Campeones, se llevó el IWC World Heavyweight Championship, fue Campeón Nacional Pesado y Medio.No obstante, uno de los máximos triunfos que consiguió fue el Campeonato Peso Ligero de la WWF. Después de grandes logros y aclamado por el público, el increíble el Perro Aguayo anunció su retiro de la lucha libre profesional en marzo de 2001, a los 55 años. Su función de despedida fue ante Universo 2000, combate en el que después de tres caídas, el originario de Zacatecas dijo adiós al ring y a su afición perdiendo su cabellera.

El golpe más doloroso de su vida, fue el 21 de mayo de 2015, cuando vivió la muerte de su heredero El Hijo del Perro Aguayo (Pedro Aguayo Ramírez), quien falleció tras recibir una patada del Rey Misterio durante una lucha de parejas en Tijuana, por lo que, ahora con su fallecimiento, finaliza la dinastía de los canes.

De acuerdo con los Perros del Mal, Don Pedro Aguayo será velado en la funeraria Gayoso, en Av. México  en el municipio de Guadalajara, Jalisco a partir de las 10 a.m. de este jueves, donde le darán el último adiós a uno de los colosales representantes de la Lucha Libre.

Contra réplica / Alondra Espinoza

Perro Aguayo, de esos rudos que ya no hay: Hijo del Santo

Marcó un estilo inigualable, amo de los cuadriláteros. 

Triste por la muerte del legendario Perro Aguayo, el Hijo del Santo lo recordó como uno de los mejores rudos que ha dado la lucha libre en México, un buen compañero, amigo y quien fue parte importante en su carrera.

“Fue un gran luchador, un gran rudo, de esos rudos que ya no hay. Era muy carismático, lo quería mucho la gente como rudo y como técnico, qué triste que ya no está con nosotros, hizo una gran carrera luchística”, señaló el luchador en entrevista.

Sin conocerse las causas de su fallecimiento, don Pedro Aguayo Damián dejó de existir este miércoles en Tala, Jalisco, a los 73 años, para que la lucha libre en México y el mundo volviera a vestirse de luto.

El heredero de la leyenda del “Enmascarado de Plata” lo recordó como un rufián como pocos, “con una personalidad muy singular” como lo fueron Cavernario Galindo o René Guajardo.

“Hacían como querían al público, si querían que se enojara lo lograban enardecer y si se querían echárselo a la bolsa también lo sabían hacer. El Perro está entre los mejores rudos, en cuestión de rudezas y de carisma fue uno de los mejores, tal vez de los mejores que he visto y hasta la actualidad, ya no hay de esos rudos”, apuntó.

Así como el Hijo del Santo recuerda la encarnizada rivalidad que el “Can de Nochistlán” tuvo con El Santo, ante quien perdió la cabellera en 1975, tampoco olvida que el Perro Aguayo, cuando ya era una estrella, fue importante en su carrera, pues lo impulsó a ser mejor.

“Estoy muy agradecido con el Perro porque cuando él ya era una gran estrella en el Toreo (de Cuatro Caminos) y yo empezaba, para mí era difícil subir de una tercera lucha a una estelar y realmente como sucede en los toros, quien me dio la alternativa fue el Perro Aguayo”, añadió.

El Hijo del Santo agregó que por la rivalidad del Perro Aguayo y Fishman contra Canek él pudo subir a esos sitios estelares haciendo pareja con el “Príncipe Maya”.

“Siempre se los agradezco a los tres porque creyeron en mí como rival, como luchador, yo estaba muy jovencito, con poco peso, pero tuvieron confianza y sabían que no me iba a quedar atrás, esa gran oportunidad la tengo muy presente”, subrayó.

El luchador dejó en claro que todos los recuerdos que tiene de Pedro Aguayo son buenos y, aunque lamentó su muerte, mencionó que el legendario ídolo ahora ya está junto al Hijo del Perro Aguayo.

“Fue un buen compañero, un buen amigo, tengo muy bonitos recuerdos de él, todos los recuerdos de él son buenos. Fue de esos luchadores que todos querían, era buena gente, muy sencillo, muy buena persona… ahora ya está con su hijo, ya están juntos el ‘Perrito’ y él”, concluyó.

Fuente: Notimex / excelsior