Con el objetivo de
aprovechar materiales que pueden ser reutilizados de manera innovadora en el
diseño y la construcción de vivienda, la universidad Iteso en colaboración con
la Fundación José Cuervo, lanzó el primer concurso internacional para el diseño
conceptual de vivienda social sustentable con materiales que la industria
tequilera desecha tras la elaboración del tequila.
La convocatoria está abierta para
profesionales de arquitectura, ingeniería civil y áreas afines que estén
dispuestos a desarrollar un prototipo de vivienda utilizando madera de las
barricas de roble americano, fibra del agave o bagazo, vidrio de las botellas
de tequila que ya no se utilizan, piedras de obsidiana y de ópalo que son
comunes en la región.
Sonia Espínola, directora de la
Fundación José Cuervo, informa que “la idea es que los chicos con todos estos
materiales utilicen la creatividad y lo puedan hacer. Lo más importante es que
cuando se elija un modelo ganador, la Fundación se compromete a hacer una casa
sustentable para una familia vulnerable de Tequila.”
Convocan a estudiantes y profesionales de la ingeniería y
arquitectura, a construir una casa con desechos del agave.
Construir una vivienda para familias vulnerables de
Tequila, con base en desechos de agave, maderas de barricas y botellas de
vidrio, es el objetivo del Primer Concurso Internacional de Vivienda Social
Sustentable, convocado por el Departamento de Hábitat y Desarrollo Urbano del
Iteso y la Fundación Cuervo.
El concurso forma parte del Segundo Congreso
Internacional sobre Sustentabilidad en los Hábitats, que se efectuará del 5 al
7 de septiembre en el campus del Iteso, explicó Mónica Solórzano Gil,
coordinadora de posgrados de sustentabilidad en la universidad jesuita.
“Prácticamente lo que buscamos es el aprovechamiento de
los materiales que se generan a partir del proceso de fabricación del tequila.
Algunos de los insumos pueden ser reciclables, como la fibra del agave después
de la molienda, reutilizamos piedras de la región, ya que hay yacimientos de
obsidiana y minas de ópalo, así como maderas de desecho de las barricas que ya
acabaron su vida útil”, explicó.
En el concurso pueden participar estudiantes y
profesionales de arquitectura, ingeniería civil, diseño industrial e ingeniería
ambiental.
Hasta el momento, ya se tienen 130 equipos inscritos de
35 ciudades de México, España y América Latina.
La idea es que el prototipo ganador se construya a
principios de 2019, en la colonia La Cofradía, de Tequila.
Mayores informes en el sitio:
Fuente: El Occidental / Viridiana Saavedra
UdgTv / Ignacio Pérez
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