Recuerdan
la Batalla de Orendáin
Con una descarga de balas de salva, elementos del
Ejército Mexicano de la Quinta Región conmemoraron el 99 Aniversario de la
Batalla de Orendáin, la cual dio inicio a la derrota de las tropas huertistas
asentadas en la ciudad de Guadalajara y considerado como uno de los capítulos
más importantes de la Revolución Mexicana.
La Plaza de las Américas Juan Pablo II fue el escenario
de esta ceremonia cívico-militar, en donde tanto el Ejecutivo estatal como los
mandos castrenses expresaron su mutuo respeto y refrendaron su compromiso para
trabajar a favor de la sociedad mexicana, al defenderla y apoyarla en
situaciones de emergencia.
Durante el acto oficial se indicó que dentro de las
figuras de esta etapa de la Historia mexicana destacaban Francisco Villa,
Manuel M. Diéguez, Álvaro Obregón, entre otros personajes que son considerados
claves en el movimiento revolucionario.
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Foto El Informador |
"Obregón emprendía desde hacía meses la campaña
militar proveniente desde Sonora al mando del ejército del noroeste, en una
cruzada que tenía como objetivo el control de Sonora, Coahuila, Sinaloa,
Nayarit, Colima y Jalisco que sería de vital importancia para abrir camino en
el Occidente", expresó el orador.
Dentro de esta cruzada armamentista, uno de los capítulos
sobresalientes fue el de la llamada Batalla de Orendáin que fue "un
momento clave para los constitucionalistas, pues gracias a ésta se logró tomar
la ciudad de Guadalajara y con ello el control de una de las rutas más importantes
hacia el centro del país, la Ciudad de México. Obregón llegó a Etzatlán el 23 de junio, en donde ya lo
estaban esperando otros elementos del Ejército para estudiar la situación y
cómo llegar a Guadalajara, en donde los Huertistas ya habían desplegado más de
nueve mil elementos.
En su turno Arturo Zamora Jiménez, secretario general de
Gobierno, señaló que se reconocen las tareas que realizan los elementos
castrenses y que se fraguan en un sinfín de gestas heroicas. "La realidad
de nuestro Estado mexicano independiente, libre, institucional, justo,
tolerante y respetuoso de los derechos humanos" como principales valores
del Ejército Mexicano.
Agregó que en este contexto destaca la Batalla de
Orendáin del 7 de julio de 1914 y la cual contribuiría a la conformación de la
República y del Ejército constitucionalista, todo esto con el apoyo del ex
gobernador jalisciense Manuel M. Diéguez y el general Mier.
Señaló que esta batalla "evidencia los ideales sobre
los cuales descansan los valores militares fundamentales en el país, mismos que
se traducen en la protección, defensa, sostenimiento, permanencia y
recuperación del orden constitucional. Hoy en día el Ejército Mexicano ha
venido permeando una serie de valores y principios que a todos nos quedan muy
claros, que campean en la República Mexicana, en donde la lealtad a la Patria,
la disciplina, el orden y sobre todo la transparencia, son elementos
importantes del Ejército moderno".
Zamora Jiménez indicó que "hoy en día la lealtad, la
perseverancia y el apoyo a la población civil en casos de graves contingencias
y desastres naturales y humanos, está el Ejército Mexicano" para atender a
la población civil.
Finalmente señaló que el Ejército Mexicano es garante de
la salvaguarda, integridad, independencia y soberanía de México. "Jalisco
tenemos un gran respeto por las Fuerzas Armadas, lo seguiremos teniendo, porque
es un gran honor portar las armas y el uniforme de la Patria que trae consigo
importantes responsabilidades y obligaciones, mismas que han sido desempeñadas
exitosamente por el Ejército Mexicano en toda ocasión, por eso es preciso
realizarles un homenaje a todos los elementos".
''Il
postino'' GDL..
Guadalajara,
a 90 leguas
De acuerdo con la publicación Datos históricos sobre los
servicios de correos en la ciudad de Guadalajara, Jalisco, escrito por Daniel
Muñoz Gómez, la primera información que se tiene sobre el servicio de correos
en la ciudad es del 19 de noviembre de 1620, “día en que se levantó un acta en
la Ciudad de México para determinar la distancia entre ambas ciudades,
fijándose la de noventa leguas (casi 400 kilómetros) para los efectos de las
liquidaciones a los contratistas de la ruta, a razón de $16 pesos por cada
veinte de recorrido, suponiéndose fundadamente que esa debe haber sido también,
la fecha en que se estableció acá la primera oficina postal, faltando sólo por
saber el sitio de su ubicación y el nombre de la persona que la sirvió con el
carácter de jefe”.
Sin embargo, Muñoz Gómez, exinspector postal, resalta que
al momento de la llegada de los españoles, que tenían un sistema parecido al
que usaban los indígenas, la Reina Cihuapilli, de Tonallan (Tonalá), tenía
hombres entrenados como mensajeros que llevaban órdenes y “recados oficiales a
los caciques de los señoríos que dependían de sus soberanía lo mismo que a los
de los demás reinos colindantes como Ahualulco, Tlajomulco, Poncitlán,
Ixtlahuacán, etc. y otros más lejanos”.
A partir de enero de 1778 a la administración de
Guadalajara se le destinaron recursos para pagar el sueldo del jefe y el
cajero. Además, se autorizó que los administradores trajeran bastón, símbolo de
su jerarquía. Se ordenó que los empleados usaran uniforme y los contratistas de
rutas postales llevarán espadas para protegerse, ya que desde 1773 se establecieron dos rutas nuevas: “Una
al noroeste, pasando por las ciudades de Ahualulco, Etzatlán, Ixtlán,
Compostela, Tepic, Acaponeta, Real del Rosario, Culiacán, Alamos y Ures,
fundándose en ellas, oficinas que le quedaron adscritas para los efectos de la
situación de fondos, con el nombre de “Estafetas Agregadas”; la otra iba con
destino al “Real de Bolaños” pasando por Tequila, Magdalena y Hostotipaquillo”.
En 1791 se autorizó un aumento al presupuesto de la
Oficina de Postas de Guadalajara. Con
los recursos se pagarían los servicios de cuatro empleados y la renta de una
finca “ubicada en la 2da. calle de San Francisco (16 de Septiembre), núm. 4,
esquina con la que hoy es López Cotilla, según lo consigna el culto historiador
Santoscoy”.
Cien años después, la oficina se cambió a la calle de
Belén. Para ese entonces tenía cinco carteros, tres oficiales, un escribiente,
un inspector y tres conductores.
Gómez Muñoz precisa que fue el 15 de mayo de 1886 cuando
llegó a Guadalajara el primer tren directo de la Ciudad de México, evento que
modificó el sistema de transportación de correspondencia, que había pasado
comenzado con a pie, luego con el caballo y más tarde en diligencia…