El presupuesto federal persigna la cultura.
El diputado Salvador Caro afirma que eso fue lo que solicitó el Ejecutivo estatal.
Reza el dicho que al cliente se le da lo que pida. Y si el Gobierno del Estado pide dinero para arreglar templos, se le da dinero para arreglar templos. Y si pide par dárselo a la iniciativa privada, que así sea. Básicamente con esa consigna se dio la aprobación de los recursos para cultura en el Presupuesto de Egresos de la Federación para el Ejercicio Fiscal 2011, que contempla una fuerte cantidad de recursos para la remodelación de templos en diversos municipios del estado y una generosa partida para la construcción del Centro de Convenciones y Espectáculos de Jalisco, que impulsa la Asociación de Radiodifusoras y Televisoras de Occidente (Rato).
En lo que respecta al remozamiento de templos, el documento incluye recursos para los murales de la parroquia de San Miguel Arcángel, en Atotonilco; el templo de Nuestra Señora de la Luz, en Cañadas de Obregón; alumbrado, conservación y restauración de la parroquia de Etzatlán; la parroquia de la Inmaculada Concepción en Yahualica; la de la Virgen de Guadalupe en Valle de Guadalupe; los templos de Analco y la Purísima Concepción, en Tequila; los de San Marcos y San Sebastián en San Marcos Arteaga. Además, se incluye una partida para un Museo de Artes Sacro en Cocula y un Museo Cristero en San Julián —un millón de pesos para cada uno.
“Es un presupuesto significativamente mayor respecto del año pasado”, dice el diputado federal Salvador Caro, quien añade que también se logró una ampliación presupuestal de quince millones de pesos. Sobre los proyectos a los que se destinarán los recursos, Caro Cabrera señala que “en buena parte, el recurso es para la restauración de templos. Así se hizo la solicitud. A mí me parece que hay una demanda de apoyo fuerte de parte de los artistas y organizaciones culturales, asociaciones y proyectos, no obstante, el presupuesto se decide de acuerdo a la perspectiva que tengan los gobernadores”.
