El Instituto de la Neoprehistoria: Capítulo II es una exposición de arte contemporáneo de Ernesto Solana, que plantea una entidad ficticia que surge de la investigación sobre la prehistoria mexicana y que se inauguró, en el Centro Interpretativo Guachimontones Phil Weigand, donde se exponen piezas sobre seres antropomorfos e intersexuales, artefactos prehispánicos y archivos históricos en los que se reutilizó la geología de la zona arqueológica, explotada desde tiempos prehistóricos por sus yacimientos de obsidiana y otras piedras volcánicas.
La muestra, que se presenta en el marco de la feria de arte contemporáneo “Estación Material”, Anna Bárbara Casillas, Coordinadora General Estratégica de Desarrollo Social del Gobierno de Jalisco, recordó que desde el inicio de la administración se planteó la formación del OPD de Museos, Exposiciones y Galerías (MEG), lo cual “ha facilitado que tengamos interacciones como la del día de hoy, no solamente aquí, sino en todos los museos de Jalisco”.
Por su parte Lourdes González, Secretaria de Cultura de Jalisco, agregó que esta exposición es resultado de una colaboración estatal, nacional e internacional con el Museo de Historia Natural de Nueva York, que posee una cantidad importante de piezas de la Hacienda de la Estanzuela; la Secretaría de Innovación, Ciencia y Tecnología de Jalisco, el Bristol Museum and Art Gallery del Reino Unido, así como el INAH Jalisco, la Biblioteca Pública del Estado que prestó los archivos personales de Phil Wiegand y El Colegio de Michoacán que contribuyó con la gestión del laboratorio y de la investigación de 11 piezas arqueológicas.
Además la titular de la Secretaría de Cultura señaló que el trabajo que Ernesto Solana realiza en el Instituto de la Neoprehistoria: Capítulo II, es “un ejercicio de reapropiación y reinterpretación de una historia común y lejana en el tiempo, que hoy se vuelve actual y que fortalece la difusión del patrimonio histórico de nuestro Estado”.
En la exposición el artista presenta al público un argumento especulativo en torno a la idea de una prehistoria de México, utilizando la riqueza arqueológica de Jalisco. Además, a través de un ejercicio de reinterpretación y apropiación de los registros gráficos de estas piezas, Solana los reincorpora al paisaje del sitio arqueológico mediante la proyección en vivo en la pirámide principal de los Guachimontones, a la que se podrá acceder vía web, las 24 horas.
La muestra reúne instalaciones escultóricas en diversos materiales como textiles, obsidiana, cantera, y piedra volcánica, así como trabajos en formatos bidimensionales de collage fotográfico. Con esto el artista replantea el pasado con miras a concebir un futuro distinto, donde humanos y no humanos encontremos maneras de re existir. Además imita una configuración institucional y se apropia de métodos científicos de categorización y de prácticas de campo para reinterpretar y cuestionar artefactos prehispánicos e ilustraciones científicas con el fin de buscar nuevos significados.
Ernesto Solana señala que “a partir de estas piezas arqueológicas que están en distintas partes del mundo y que la única forma de acceder a ellas es vía imagen, entonces a falta de objeto físico en Jalisco porque ha sido un occidente saqueado, comercializado, se me hace interesante traer artefactos que de origen son jaliscienses y de occidente, de regreso a su tierra originaria a través de estas piezas”.
Instituto de la neoprehistoria: Capítulo II, de Ernesto Solana, se puede visitar hasta el 30 de marzo de 2022 en el Centro Interpretativo Guachimontones “Phil Weigand”, Teuchitlán, Jalisco.