Recorren ferronautas antiguas vías de tren
Sus creadores y conductores son los "ferronautas" Iván Puig y su hermano Andrés Padilla, artistas que presentaron la nave en el Laboratorio de Artes Variedades (LArVa), y que tendrá su despegue oficial el 20 de noviembre en Ciudad de México, en el Museo Nacional de Arte (Munal).
El proyecto artístico es denominado Sonda de Exploración Ferroviaria Tripulada, o SEFT-1, y tiene el objetivo de explorar las vías de ferrocarril en desuso como punto de partida para la reflexión y la investigación de su importancia histórica y tecnológica cuando se instalaron, en el porfiriato, así como implicaciones sociales y contextos actuales, explica Puig, uno de los ferronautas.
"La intención de que sea una nave espacial tiene que ver con la modernidad, de ciencia ficción, de la proyección del futuro, pero que se hizo en el pasado; de alguna manera es una revisión de esos resabios del proyecto moderno. Por un lado es eso, y por otro es la fantasía del viaje espacial".
Son más de 9 mil kilómetros de vías en desuso las que hay en el País, dice Padilla, pero sólo se seleccionaron 12 tramos -ubicados unos en Yucatán, Oaxaca y Jalisco, entre Etzatlán y La Vega- con los que se pretende abarcar puntos fundamentales de la República, a veces influenciados por su importancia histórica, como en Guanajuato, donde se dio el Grito de Dolores, que arrancó con la gesta de Independencia.
"La nave en sí no tiene cámaras ni transmite por sí sola. Iremos Iván y yo a bordo con cámara de fotos y video, pero sí cuenta con una computadora y antena para Internet, con las cuales vamos a estar alimentando la página en web (www.seft1.net), con las historias, videos y fotografías, y con reflexiones del tránsito de estos caminos", explica Padilla.
Se tendrán muchos resultados con el proyecto, indica Puig. Una de las cosas que se busca es la aventura, la experiencia personal y su transmisión con diferentes medios, uno de ellos es la página que funcionaría como documental, y, como el oficio de ambos es el arte, también buscan generar piezas con lo que se encuentre o capture en el camino.
"También (una intención) es exponer el archivo. El proyecto es parte de una curaduría (de una exposición) llamada 'Los Sueños de una Nación', de José Luis Barrios y Daniel Garza, que será en el Munal, en septiembre del 2011", expresa el segundo ferronauta, Padilla.
Los tapatíos Puig y Padilla están listos para emprender este recorrido que calculan tomará seis meses. Saben que habrá frío, calor y lluvia en el trayecto, es más, que podrían tener problemas mecánicos o salir de las vías por accidente.
"Ha sido intensivo, ¿cómo funciona un auto? Nos hemos dado cuenta de lo complejo, pero finalmente sabemos algo de mecánica, de electrónica, somos campistas los dos y nos vamos a adiestrar con Ferrocarriles Mexicanos para el tránsito en vías y su análisis en terrenos sin mantenimiento", explica Puig sobre este moderno sistema de transporte.
En el 2005, Puig recuperó de sus libretas el proyecto, entonces olvidado, de SEFT-1. Un año después los artistas empezaron a conseguir apoyos para darle forma, empezando con una beca del Centro Multimedia, y siguiendo con apoyos de Conaculta, así como de Ferrocarriles Mexicanos, que les donó el mecanismo con que circularán en vías.
"El despegue será en el Munal, porque ahí fue el edificio de la Secretaría de Comunicaciones y Obras Públicas, que hizo Porfirio Díaz, y ahí se construyó la red de ferrocarriles en el País, simbólicamente es importante", indica Padilla sobre el inicio de actividades del vehículo, que busca dar otra visión de la comunicación terrestre en México…
Para Saber.
El vehículo irá a 20 km/h.
Sistema Hi-rail delantero
Llantas especiales para rodar en las vías.
Célula de hidrógeno.
Panel solar.
Fuselaje de aluminio.
Camarote dormitorio.
Sistema Hi-rail trasero.
EN MOVIMIENTO
En la página de Internet www.seft1.net se podrán observar mapas y el lugar en el que se encuentre la nave sobre las vías.
-Chihuahua
-Nuevo León
-Veracruz
-Yucatán
-Guanajuato
-San Luis Potosí
-Oaxaca
Fuente:http://www.mural.com/
Historia.
Reflexiona Iván Puig sobre la importancia histórica del ferrocarril
Con el objetivo de provocar la reflexión y generar pensamiento en torno al ferrocarril y su importancia para el desarrollo del país desde una perspectiva histórica y social, así como su desuso como medio de transporte y sus circunstancias y contextos actuales, el creador mexicano Iván Puig Domene lleva a cabo un proyecto.
Se trata de SEFT-1 (Sonda de Exploración Ferroviaria Tripulada), con el cual busca contextualizar no sólo la historia de este medio de transporte, sino la de las sucesiones tecnológicas y la idea del progreso en el país.
SEFT-1, explica Puig Domene en entrevista, es un proyecto de arte que propone la exploración de vías de ferrocarril en desuso como punto de partida para la reflexión y la investigación mediante un vehículo tripulado, transmitiendo los resultados a un sitio web y haciendo de transbordador de preguntas e historias entre las poblaciones a su paso.
"Es un proyecto que suma muchos esfuerzos y a muchas personas. Actualmente estamos trabajando en la segunda etapa que es la construcción, después viene la tercera que son las exploraciones y posteriormente las diferentes muestras del proyecto en diferentes espacios", añadió el artista.
"Al mismo tiempo que continúan las exploraciones. Llevamos trabajando cerca de cinco años en el proyecto y en agosto de 2010 se realizará la primera exposición, aunque seguiremos trabajando en más rutas y una propuesta editorial", dijo.
El origen del ferrocarril en México se remonta a 1873, año que se dio concesión a un capital extranjero para la construcción de la línea que conectó la Ciudad de México y el puerto de Veracruz con 679 kilómetros de extensión.
Durante el Porfiriato creció el tendido de vías a gran escala y el ferrocarril jugó un papel esencial durante la Revolución Mexicana.
En las décadas posteriores se reconstruyó lo destruido y continuó el crecimiento de las redes, al tiempo que el país se esforzaba por hacerse del control de los ferrocarriles.
Para 1970 se entregaban a Ferrocarriles Nacionales de México los últimos dos trayectos privados, con lo que culminaba la nacionalización de las líneas férreas, un proceso que había iniciado desde principios de siglo.
"En los años que siguieron, este sistema de transporte se vio envuelto en la inercia del deterioro, ocasionado por los insuficientes recursos económicos, las limitaciones tecnológicas y la enorme incapacidad administrativa para modificar adecuadamente normas y procedimientos", añadió.
"Y los intereses económicos y políticos de pandillas de funcionarios públicos y sindicales", precisó Puig.
En 1995 el país contaba con más de 26 mil kilómetros de tendido de vías, en ese entonces se consolidó la propuesta existente desde los años 80 de concesionar a empresas privadas el manejo de los Ferrocarriles Nacionales de México.
Entre 1996 y 1998 se concedieron las licitaciones a una combinación de capital nacional y extranjero para hacer uso y explotación de la red ferroviaria durante los próximos 50 años, quedando dividida la red en este proceso, en tres grandes ramales: Ferrocarril del Noreste, Ferrocarril Pacífico Norte y Ferrocarril del Sureste.
Se dieron posteriormente concesiones menores de vías secundarias y vías cortas, lo que cortó prácticamente con todo el servicio de transporte de pasajeros, con excepción de un par de recorridos turísticos.
Sin embargo, aseguró el creador, hay vías que cayeron en desuso, hay algunos trayectos que han sido abandonados por completo y presentan incluso, por tramos, falta de rieles.
Dada la reciente desaparición del tren de pasajeros, se plantea la pregunta de si es posible encontrar aún vestigios en esos espacios.
En este contexto, Puig ofreció un trabajo que pone de relieve al ferrocarril, su importancia histórica, sus implicaciones sociales, circunstancias y contextos actuales.
Si bien el tema del ferrocarril toma especial relevancia este año que se conmemora el Centenario del inicio de la Revolución Mexicana, el artista visual aseguró que es un tópico que le ha interesado desde hace mucho tiempo.
"Digamos que la relevancia histórica del ferrocarril aparece en el proyecto como un buen pretexto para traer a la mesa preguntas que tienen que ver con la memoria y la conciencia crítica", precisó.
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