Alrededor de 15.5 kilómetros de caminos por los que anteriormente transitaban los ferrocarriles en esta región serán ahora senderos peatonales, ciclistas y ecuestres para la recreación y convivencia social así como una medida de rescate patrimonial que incluye la restauración de estaciones de ferrocarril para convertirlas en centros culturales.
Para transformar esos espacios rurales, se invertirán poco más de 30 millones de pesos de los cuales 20 millones son recursos del gobierno federal y 10 millones de pesos del estatal, informó Modesto Aceves Ascencio, director general de Patrimonio Cultural de la Secretaría de Cultura de Jalisco (SCJ)...
Aceves Ascencio añadió que en estas obras que incluyen la participación de varias instancias estatales se contempla la recuperación ambiental de la zona con reforestación, el rescate patrimonial y el desarrollo cultural convirtiendo en unas vías recreativas de zonas rurales que además son rutas ordinarias de traslado de muchos trabajadores de una comunidad a otra en bicicleta.“Esta infraestructura nos va a permitir recuperar los derechos de vía, promover sistemas alternos de movilidad no motorizada, rehabilitar y mantener viva la memoria del patrimonio cultural ferroviario, construir una relación equilibrada entre el campo y la ciudad, generar valores de respeto, convivencia y comunicación a la naturaleza, generar un espacio de encuentro, convivencia y disfrute entre la población y promover la reactivación económica de las comunicaciones rurales”, expuso.
Primeros cinco tramos
Como primera etapa de las Vías Verdes se iniciaron los trabajos en cinco tramos que en su conjunto son 15.5 kilómetros para ser restaurados y rehabilitados.
El funcionario explicó que las rutas están en los municipios de Ameca con la recuperación de nueve kilómetros donde las obras van en un avance del 60 por ciento, en Ahualulco con dos kilómetros con un avance del 25 por ciento, en La Vega con 1.5 kilómetros y un avance de obra del 40 por ciento, Ocotlán con 1,5 kilómetros y un 15 por ciento de avance y Atotonilco con 1.5 kilómetros y un avance de obra del 80 por ciento.
“Hemos decidido escoger estos puntos de manera estratégica, como sabemos que es un proyecto que no tendremos probablemente todos los recursos para terminarlos, hemos decidido iniciar en esas localidades para que la misma gente pida la ampliación de las vías como sucedió con la Vía Recreactiva”, dijo. El impacto social Para la construcción de las Vías Verdes se requirió de un Plan Maestro interdisciplinario que contempló un estudio para medir y posibilitar el desarrollo cultural, ambiental, turístico y económico de los lugares en los que se realizan las primeras obras.
Francisco Javier Díaz, responsable de la elaboración del Plan Maestro comentó que en cada tramo se realizó un diagnóstico de la zona para determinar el acervo cultural patrimonial a rescatar tanto en la zona de las vías como en los lugares cercamos como medida no solamente de rescate, sino también para potenciar la atracción de visitantes y el desarrollo económico y social.
“Se están tomando en cuenta aspectos como la accesibilidad a los lugares, las condiciones de servicios a visitantes como estacionamiento, las condiciones de seguridad, los puntos de atracción cultural y actividades alternativas que van desde arqueológicas a ecoturísticas”, expuso.
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