Desaprovecharon indicios de narcorrrancho en Teuchitlán
Apenas en esta segunda revisión al rancho se están tomando las prendas de vestir y zapatos como indicios.
El antropólogo forense Marcos Raygoza consideró que la ropa y el calzado localizados en el Rancho Izaguirre, donde el colectivo Guerreros Buscadores de Jalisco descubrió crematorios con restos óseos incinerados, pudieron contener indicios importantes que habrían ayudado en las investigaciones de personas desaparecidas.
"Se puede regresar (a un sitio de inspección) si así nos lo dice el análisis de los indicios".
"Lo que sí es alarmante", señaló el experto, "es si esta evidencia (se encontró la semana pasada) por omisión, sobre todo porque los colectivos han señalado que encontraron mucha ropa, sobre todo zapatos".
El ex integrante del Instituto Jalisciense de Ciencias Forenses (IJCF), quien fue forense por 26 años, cuestionó por qué las prendas no fueron enviadas al Centro de Identificación Humana cuando fueron descubiertas en septiembre del año pasado.
"Si vas a un rancho donde desaparecía gente, pues obviamente las prendas son de suma importancia para hacer una trazabilidad. ¿Qué es lo primero que preguntan cuando alguien va a denunciar una desaparición?: '¿cómo iba vestido?'.
"¿Por qué esas prendas no están en el Centro de Identificación Humana?, ¿qué el Centro de Identificación Humana nada más recibe evidencia biológica? Porque los zapatos pueden contener valiosa información; se puede, incluso, tratar de obtener ADN del sudor que tienen, si tienen manchas de sangre, en fin, algún fragmento de uña".
Aunque es altamente probable que ya no se pueda encontrar ADN en la ropa, recomendó buscar en ella al menos pelos y fibras.
"En su tesis para obtener el grado (la doctora Gabriela Camila, si no me equivoco), nada más analizando las fichas de desaparecidos logró sacar valiosa información estadística donde ella dice de qué edad, qué edad es el promedio o los picos de personas que desaparecen. Y si hay más hombres, si hay menos mujeres, las regiones en las que se dan más estas desapariciones.
"Sería recomendable que se echara mano de la experiencia. Y ya que estamos hablando de prendas, pues ver si en esas fichas se menciona las prendas que llevaban, ver si alguno de estos pares de zapatos coincide con lo que las fichas nos puedan dar de información".
También habría que revisar si el desgaste y saturación que hay en los forenses o empleados de Fiscalía ha influido en los resultados.
Dijo que es urgente un curso relámpago para que los colectivos sepan cómo tratar los restos y eso ayude en los trabajos de identificación. Aclaró que el georradar que se usa en las investigaciones sólo detecta la tierra removida, no los restos humanos.
ASÍ LO DIJO
"Si descontextualizamos la evidencia, las prendas, los mismos huesos, no hay forma de hacer una trazabilidad de que la víctima estuvo ahí. Si esto llega a un juicio, lo primero que la defensa le va a decir al juez es si existe una fijación, un levantamiento, un peritaje que diga que esa prenda fue extraída de ahí; pues no, porque no hubo una fe ministerial".
Fuente: Grupo Reforma / Mural / Noé Magallón
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