La lluvia de estrellas Perseidas es uno de los eventos astronómicos más esperados del año, y en 2024 no será la excepción.
Este fenómeno, que ocurre cada año en agosto, es conocido por su espectacular despliegue de meteoros, y en México, las condiciones suelen ser favorables para disfrutarlo. Las Perseidas, también llamadas "Lágrimas de San Lorenzo", alcanzan su pico máximo de actividad entre el 11 y el 13 de agosto, cuando se pueden observar hasta 100 meteoros por hora en cielos oscuros y despejados.
En 2024, se espera que las Perseidas sean especialmente visibles debido a la fase lunar.
Este año, la Luna estará en su fase creciente, lo que significa que su luz no interferirá significativamente con la observación de los meteoros.
Esto incrementa las posibilidades de ver el mayor número de estrellas fugaces.
En México, tanto en zonas urbanas como rurales, se podrán ver a simple vista, aunque los mejores lugares para observarlas serán aquellos alejados de la contaminación lumínica.
Para disfrutar al máximo de las Perseidas, es recomendable la observación en un lugar oscuros como parques nacionales o reservas astronómicas.
El mejor momento para observar las Perseidas será entre la medianoche y el amanecer, cuando la constelación de Perseo, de la cual provienen, estará más alta en el cielo.
En México, mirando hacia el noreste, se podrá disfrutar del espectáculo.
Aunque las estrellas fugaces se pueden ver en cualquier parte del cielo, observar hacia esta dirección aumentará las probabilidades de ver más meteoros.
Este año, las Perseidas coinciden con un fin de semana, lo que significa que muchas personas tendrán la oportunidad de disfrutar de este evento sin la presión de madrugar para el trabajo o la escuela.
Su nombre proviene de la constelación de Perseo, ya que los meteoros parecen irradiar desde este punto en el cielo. Sin embargo, el fenómeno en sí es causado por el paso de la Tierra a través de los restos dejados por el cometa 109P/Swift-Tuttle, que orbita el Sol aproximadamente cada 133 años.
El primer registro documentado de la lluvia de Perseidas proviene de la antigua China, alrededor del año 36 d.C. Sin embargo, no fue hasta el siglo XIX que se comenzó a comprender la verdadera naturaleza de este fenómeno.
En 1835, el astrónomo belga Adolphe Quetelet identificó a Perseo como la fuente de estos meteoros y describió el fenómeno como un evento anual.
Luego, en 1862, los astrónomos Lewis Swift y Horace Parnell Tuttle descubrieron el cometa Swift-Tuttle, confirmando que las Perseidas eran causadas por los restos de este cometa. Desde entonces, la lluvia de Perseidas se ha convertido en uno de los eventos astronómicos más estudiados y observados.","description":
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