Mientras las autoridades hacen oídos sordos, la población padece las consecuencias de la contaminación en el Río Salado: Resistencia Civil por el Valle
Integrantes de la organización Resistencia Civil por el Valle señalaron que ha habido un incremento de “200 casos de insuficiencia renal” en el municipio de Tala, Jalisco, a causa de la contaminación del Río Salado por lixiviados, derrames de residuos industriales, así como de drenajes de comunidades vecinas.
De acuerdo con José Padilla, uno de los integrantes de esta asociación, la problemática es sumamente grave, debido a que las personas utilizan “el agua de los manantiales para bañarse, lavar la ropa, los trastes y para el consumo en forma directa”. Este fenómeno se deriva, en parte, por los desechos industriales que vierten tanto Pemex como compañías tequileras de “Arandas, Atotonilco y Tepatitlán”, así como por las aguas negras del poblado Ruiseñores, una comunidad aledaña.
Sin embargo, este fenómeno puede agravarse si se instala un vertedero intermunicipal, que permitiría que la basura de Tequila, El Arenal y Amatitán sea depositada en Tala. Esta es la razón por la que las y los pobladores de este municipio exigen una mesa de diálogo con las autoridades, para que se realice un “diagnóstico claro antes de tomar una decisión”. Así lo expresó José Lira, miembro de la Resistencia.
Por su parte, en entrevista con Témoris Grecko, Padilla aseguró que el municipio “no está en actitud de recibir más basura” de zonas circunvecinas. De modo que exigen la creación de un basurero exclusivo para Tala, propuesta de la que el gobierno municipal no ha hecho eco. Ante la indiferencia, acudieron con el gobernador del estado, Enrique Alfaro, quien afirmó “yo me llevo la tarea”, como muestra de su compromiso para solucionar esta situación.
Fuente: Julioastillero
Documento presentado al Gobernador de Jalisco
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