Infundir miedo para quitarse del camino a una oposición crítica es lo que logró el presidente electo del municipio de Magdalena por la coalición Fuerza y Corazón por Jalisco, Marco Trejo Téllez Girón, con las agresiones y amenazas de “levantones” de su oponente de campaña de Movimiento Ciudadano (MC), Cristina Ornelas, que por terror a las amenazas vive exiliada en otra zona.
El problema comenzó en esta administración que está por terminar y de la que ambos son integrantes, el primero como presidente que buscaba la reelección, la segunda como regidora de oposición y que cuestionaba todos los actos de gobierno por considerar que en algunos había irregularidades, en especial en obra pública.
Ese roce se trasladó a la campaña y el 2 de junio aún sin tener tendencias de los resultados el candidato del PRI fue con un grupo de simpatizantes a agredir a la de MC hasta su casa en donde golpeó la puerta para tratar de abrirla, al no lograrlo se fue por la parte posterior e hizo disparos hacia la casa.
Además tras la denuncia por violencia política por cuestión de género, los ataques se reforzaron y entraron los simpatizantes del hidalguense para trata de intimidarla a ella y toda su familia al decir en redes sociales que ella no sabía perder y que necesitaba hasta un psiquiatra porque “estaba loca”, por decir lo menos.
De ahí la violencia, de la que ya se puso denuncia ante la a fiscalía de Delitos Electorales, que encabeza Carlos Manuel Rodríguez; ante el IEPC o ante la Fiscalía del Estado, no ha surtido efectos ni se le ha otorgado la debida protección a Cristina Ornelas, es decir no se le han otorgado ningún elemento de seguridad que pueda protegerla ante las agresiones que cada vez escalan más y quedas alcanzaron con amenazas a su familia.
Ante el miedo que tiene, decidió sacar del municipio a su hija, la cual no va a la escuela, ella misma tuvo que salir por seguridad y exiliarse en otro municipio desde donde narra que analiza no regresar como regidora ya que no hay garantías de que lo pueda hacer tranquila porque hasta un grupo importante de simpatizantes de Marco Trejo la ha amenazado con darle “un levantó y una cueriza”.
Por lo que espera que tanto la Fiscalía del Estado, el IEPC y la Fiscalía Especializada en Delitos Electorales intervenga y ella pueda regresar sin riesgo a la labor a la que llegó con un apoyo importante de ciudadanos de La Magdalena y es a ellos a los que debe rendir cuentas.
“Se generó una oleada de violencia en redes sociales cuando hicimos saber que habíamos actuado dentro de lo que marca la ley y eso provocó más violencia y hasta por medio de terceras personas he recibido amenazas de manera directa como la que dice ‘ahora sí me van a dar una zapatiza todo el pueblo’, además comentarios agresivos” en donde la catalogan como loca y que es una reacción por el resultado de la elección.
Lo que más le preocupa del actuar del empresario de la construcción y oriundo de Hidalgo, es que a lo largo de nueve años que ha gobernado, primero seis años de la presidencia de su esposa y luego tres de él que se van a convertir en 12 años continuos, es toda la corrupción que se pudo tener con el manejo de las de mil millones de pesos del presupuesto municipal en esas tres administraciones encabezadas por el matrimonio de Marco Trejo.
En los seis años de la administración de la esposa del priísta se desempeñó como director de Obras Públicas y muchos de los trabajos se los autosignó a su empresa sin licitaciones y sin transparentar el gasto, por lo que considera que hay un uso indebido de los recursos y hasta de enriquecimiento ilícito porque en este tiempo han aumentado su patrimonio con al menos seis casas, alguna de ella de varios millones de pesos.
Pero a su oponente no le gusta competir con las mujeres y les da un trato negativo, con amenazas como es su caso por no ser una regidora sumisa a sus caprichos de cabildo y todo eso hace “que tema por mi integridad, la de mi familia y opté por salirme del municipio porque no me siento segura aún y cuando se me dictaron medidas de protección y no veo alguna acción contundente que pare ese tipo de comentarios y agresiones”.
Todo esto tiene como objetivo de que no regrese al Cabildo y que tenga miedo, lo cual lograron y es por eso que tuvo que salir del municipio y exhortó a las autoridades se implementen las medidas que se necesitan para que ella desempeñe su trabajo y pueda regresar a su lugar de origen, en donde está toda su familia.
En cuanto a seguir como regidora en la próxima administración aún no lo resuelve y va a esperar a que el dirigente estatal de MC, Manuel Romo, emita una postura y también exija públicamente las medidas de protección efectivas para ella y que se le garantice las condiciones para trabajar.
Fuente: El Occidental / Víctor Ramírez
1 comentario:
De verdad esto es periodismo?? No tergiversen la información!! Todo esto que está escrito es difamatorio!!
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